A pesar de que, en la actualidad, la Bolsa Mexicana de
Valores (BMV) presenta rendimientos atractivos frente a otros mercados del
mundo, no hay que olvidar 2 factores que hacen ruido a la hora de su valuación:
Sí, el mercado aún parece estar muy por debajo de su tamaño respecto al
valor de su economía pero el mercado tiene una altísima concentración en tan
solo un selecto grupo de emisoras.
Las 10 empresas más bursátiles (con mayor negociación) tienen en conjunto
más del 76% de peso en el IPC. Llendo más a detalle, 2 pertenecen al sector de
las telecomunicaciones, 2 al financiero, 2 al minero, 2 al de consumo, una al
industrial y otra al de construcción.
Otro hecho importante es que tan solo una empresa (América Móvil), con
un valor de mercado de 98,165 millones de usd, representa poco más del 23% de
todo el IPC. No hace mucho fué el 30%.
Sabemos que es una época complicada para que más empresas se hagan
públicas, sin embargo, la tarea se divide en 2: Por un lado, la propia BMV
deberá buscar la forma de fomentar el crecimiento de sus empresas emisoras,
facilitando las requisiciones y obligaciones de las mismas, mientras que por el
lado contrario, las mismas empresas deben entender que la financiación bursátil
(ya sea en renta variable o fija) muchas veces representa un costo menor contra
los sistemas tradicionales de financiamiento (privado o gubernamental).