En el comentario anterior, hablé del por qué el Banco Central de EEUU anunciaba una disminución en sus estímulos económicos pero ¿cómo afecta esta decisión a otras economías del mundo y en especial a México?
La respuesta sería que el efecto llega en 2 vías principalmente. La primera, aunque la menos significativa en el corto plazo, sería la comercial. Y es que con tasas más elevadas en aquél País se esperaría que los Norteamericanos piensen un poco más entre acceder a créditos bancarios o el ahorro, con una posible reducción en su gasto que pudiera afectar a las exportaciones Mexicanas.
La segunda vendría en los mercados financieros. En primer lugar y lo vimos el día de ayer, una reacción de venta en las bolsas de valores a causa del temor de que la economía de EEUU aún necesite de estímulos para salir a flote. En segundo lugar es el tipo de cambio; Una depreciación del peso Mexicano como la vista en los últimos días se traduce en un traspaso a los precios de los bienes, es decir, provocaría una mayor inflación en el País aunque cabe señalar que éste proceso no es inmediato si no más bien tarda de 4 a 6 meses en aparecer.
Y es aquí cuando la forma de reacción del Banco Central de México se torna confusa entre, bajar la tasas de interés para propiciar el gasto en el País pero que en algún momento impacte con una subida de precios generalizada (aumentando la inflación de la que hablamos) o una subida de tasas que invite a los ahorradores a no gastar y apegarse al cumplimiento de su mandato de mantener una inflación del 3% +, - 1 punto porcentual PERO disminuyendo su ritmo de crecimiento. ???
La respuesta sería que el efecto llega en 2 vías principalmente. La primera, aunque la menos significativa en el corto plazo, sería la comercial. Y es que con tasas más elevadas en aquél País se esperaría que los Norteamericanos piensen un poco más entre acceder a créditos bancarios o el ahorro, con una posible reducción en su gasto que pudiera afectar a las exportaciones Mexicanas.
La segunda vendría en los mercados financieros. En primer lugar y lo vimos el día de ayer, una reacción de venta en las bolsas de valores a causa del temor de que la economía de EEUU aún necesite de estímulos para salir a flote. En segundo lugar es el tipo de cambio; Una depreciación del peso Mexicano como la vista en los últimos días se traduce en un traspaso a los precios de los bienes, es decir, provocaría una mayor inflación en el País aunque cabe señalar que éste proceso no es inmediato si no más bien tarda de 4 a 6 meses en aparecer.
Y es aquí cuando la forma de reacción del Banco Central de México se torna confusa entre, bajar la tasas de interés para propiciar el gasto en el País pero que en algún momento impacte con una subida de precios generalizada (aumentando la inflación de la que hablamos) o una subida de tasas que invite a los ahorradores a no gastar y apegarse al cumplimiento de su mandato de mantener una inflación del 3% +, - 1 punto porcentual PERO disminuyendo su ritmo de crecimiento. ???